domingo, 26 de abril de 2009

Historia Interactiva (10)

(Foto en honor a Cierbecillou)
Bueno, pues así deprisa y corriendo otro capítulo en un margen de tiempo supercorto (hoy estoy muy orgulloso de mí ^^) 3 entradas en 5 días no está mal. La verdad es que creo que me gusta como ha quedao, digo que creo, porque aun me gustaría darle un par de repasos más y entonces ya estaré satisfecho. Es un capítulo bonito en lo que trata a mi parecer, y muestra algo más de todo lo que está pasando. Esta vez vuelvo a tener música así a la primera, y creo que entra bien sobretodo en la primera mitad. Es cierto que es un capítulo largo pero estaba enchufado y quieras que no es lógico que cada vez sean más larguillos.
Como es el número 10 os voy a volver a poner dos enlaces de descarga en pdf de la historia como hice en el 5. Uno con los capítulos del 6-10 y otro con los 10.
Los enlaces:
Historia Interactiva (6-10)
Historia Interactiva (1-10)
En fin espero que os guste y como siempre os pido opinión.
Un saludo
PD: Aquí teneis la música.



10ª Parte:
"¡La pierna derecha! ¡Sube el brazo!"
El, tras después de casi dos meses bien entrenado brazo izquierdo de Samantha, detuvo el avance de la patada circular alta de su adversario bloqueando la espinilla de este con el exterior de su antebrazo. El impacto había sido duro, pero ya había aprendido a equilibrar su cuerpo y a responder a las distintas coyunturas que acontecen durante la lucha. Su cuerpo ya no esperaba una orden del cerebro, no necesitaba comprender y razonar, ya sabía responder automáticamente a cualquier adversidad antes de que la propia Sam se diese cuenta de ello. Su cuerpo, después de siete semanas de dura instrucción, se estaba convirtiendo en un perfecto mecanismo de ingeniería, en una complejidad de engranajes adecuadamente combinados, en un reloj suizo que se movía por medio de sangre, músculos y huesos. En un principio, Sam pensó que ese entrenamiento y ese desarrollo no cuadraban con ella, pero poco a poco fue adaptándose y vio las ventajas que podía tener; no le gustaba el contenido violento y agresivo de aquella actividad, lo que le gustaba era poder controlar y comprender su propio cuerpo hasta extremos que nunca soñó que fuesen posibles de alcanzar. Ahora no dudaba, sabía hasta donde podía saltar, hasta donde podía escalar, cuanto peso era capaz de mover, cuan fuerte podía golpear, etc. Y el poder que te otorga el no dar cuartel a la duda es un poder demasiado grande como para cometer la hipocresía de negar que le gustara. Había conocido sus límites y ellos mismos le habían sorprendido. Ahora se descubría para ella una variante latente de una frase que siempre repetía su padre, "Todo hombre oculta más de lo que muestra", y era cierto por lo menos en este caso. Su cuerpo le hablaba sin tapujos y ella sabía escuchar, él le mostraba sus necesidades y ella las saciaba. Era un extraño vínculo entre dos conocidos que nunca se habían visto antes, una sociedad secreta de solo dos miembros que eran la misma persona, era al fin la dualidad del uno. Había dado más libertad a su parte animal, o quizá solo se la había dado a ella misma. Se había despojado de todo aquel barniz de incertidumbre que durante años le había hecho desechar cualquier acción que no se considerase propia de ella. Había roto las ligaduras que la mantenían sujeta al suelo, el único límite que ahora encontraba era el cielo, y ese cielo lo podía encontrar mirando hacía arriba, pero era capaz de alcanzarlo cuando, como en ese justo momento, daba medio paso hacia adelante con su pierna derecha, giraba ligeramente hacia afuera su codo izquierdo, apresaba la pierna del contrincante con su mano derecha y lo desequilibraba mediante un barrido circular inverso con su pierna izquierda. En ese justo momento una pequeña sociedad, un pequeño pacto formado por cuerpo y mente rozaba el cielo durante un instante.
Con todo ya a su favor, Sam solo tuvo que marcar el ataque en el rostro incrédulo de Hannah.
-Hace casi dos meses me teníais a vuestra merced en Toronto y si no llega a ser por Shane justamente tú me habrías acorralado. Pero ahora es todo lo contrario, soy yo quien te tiene a mi merced y acorralada ¿No te parece irónico Hannah? -Preguntó Sam con gesto triunfal- ¿Seguro qué fue buena idea que me enseñarais a defenderme?
-No juegues con tu suerte canadiense, aun estás de pie porque yo quiero.
-Demuéstramelo.
Sam casi no tuvo tiempo de terminar la frase, Hannah ya había lanzado la palma de su mano izquierda hacía el torso que se encontraba sobre ella. Sam con grandes reflejos desvió el ataque cruzando su brazo izquierdo a la vez que aprovechaba para asestar un golpe seco con su puño derecho. Ya se veía vencedora, pero Hannah no se rendiría fácilmente y lo demostraba poniendo en liza su potente rodilla. Era algo demasiado rápido para bloquearlo, así que lo único que pudo hacer Sam fue girar sobre su mano derecha para intentar atenuar el golpe con la musculatura de su hombro. El golpe fue seco y proyectado, tanto que Sam se vió obligada a rodar abandonando su posición dominante sobre Hannah. Ahora vendría el segundo asalto, el que no dependía del estilo si no de la resistencia y la ambición por ganar. Luchaban sin tapujos, empleando todo lo que conocían, sin contenerse pues la rival les obligaba a ello, liberadas de conceptos teóricos y de vanos combates de entrenamiento. En este si se jugaban algo, aún no sabían del todo el qué, pero habiendo probado el sabor de la victoria cualquier otro les sabría amargo y vacuo.
Eran dos leonas enzarzadas en luchas que nadie más entendía, en rugidos viscerales que destruían diques de adrenalina filtrándose por los recovecos de su ser y alimentando cada fibra de su musculatura, cada pequeña hebra de sus ligamentos. Con metafóricas y literales leónidas dentelladas el combate poco a poco se fue haciendo cada vez más lento pero más crítico, al igual que el colapso de una vieja estrella. Dos o tres puñetazos más y todos los presentes podrían ver una supernova.
-¿Qué pasa? ¿Ya no es tan fácil reírse de una persona indefensa? Cuando se equilibra la balanza no os veis tan jodidamente superiores ¿verdad? -Gritaba Sam proyectando toda la rabia acumulada desde que un extraño arquero la metiese en el asiento de atrás de un coche marrón hacia su contrincante en el tatami.
-Muy bien niñata, ¿quieres sentirte importante? ¿Quieres ser el centro de atención? Tú tranquila que voy a hacer que todos se fijen en ti.
El resto de los presentes comprobaban atónitos como un combate de entrenamiento se había convertido en una pelea de orgullo debido a las rencillas acumuladas, el exceso de adrenalina y la falta de autocontrol.
Todos miraban boquiabiertos excepto un hombre mayor, de barba cana y que se recogía el poco cabello que le quedaba en una coleta. Hank había decidido que su ejercicio había llegado ya a su fin consiguiendo su objetivo, era hora de intervenir, al fin y al cabo no quería provocar males mayores ni consecuencias irreparables. Así que cuando Sam amagó su golpeo con el brazo izquierdo pretendiendo dar ventaja a la penetración de su contundente puño derecho, y Hannah flexionaba las rodillas y descendía su centro de gravedad preparándose para asestar un gancho definitivo sobre el tronco de la canadiense, como de la nada, apareció Hank para estrellar su codo izquierdo en el pómulo de Sam y su rodilla derecha en el hombro de Hannah derribándolas y poniendo fin a aquella borrachera de violencia sin sentido y escasez de materia gris. Las dos leonas veían ahora como el viejo cazador les había ganado el asalto, y exhaustas dieron por finalizada toda demostración de orgullo.
-Bueno, pues esto es justamente lo que no quiero que hagáis -Exclamó Hank con su voz que sonaba a años de whisky y tabaco. Se giró hacia Hannah y Sam y con gesto cansado les dijo- Habéis sido tan estúpidas que perdisteis el contacto con vuestro entorno. Estabais tan preocupadas por resarciros de viejas rencillas que he podido acercarme y derribaros sin siquiera esforzarme, por dios, si ni siquiera me lo habéis puesto difícil.
Hannah y Sam, que todavía estaban recuperando el aliento, se miraron mutuamente ignorando las palabras de Hank, ahí había algo que aun debían solucionar. El veterano soldado dándose cuenta de lo que pasaba por la cabeza de ambas salió al paso de los pensamientos de las dos reclutas.
-Y ni se os ocurra volver a pensar en romperos las piernas la una a la otra, porque si no seré yo el que os meta un mes en la enfermería, ¿entendido? -Preguntó Hank con ademán tranquilo- No sé si os dais cuenta pero sois compañeras, vais a tener que confiarle vuestra espalda a la otra y si no tenéis a alguien que os la proteja puede que os ocurra lo mismo que ha ocurrido hace un minuto, un tercero en discordia puede destrozaros, con la única diferencia de que esto es un simple entrenamiento y allí no vais a tener un minuto de respiro -Fue dándose la vuelta lentamente mientras les aguantaba la mirada a ambas gladiadoras- Y a los demás, espero que hayáis aprendido algo de todo esto. Debéis estar concentrados en todo momento porque nunca sabréis si de repente os encontrareis en desventaja. Debéis de ser capaces de estar preparados para todo y evaluar correctamente la situación, por ello debéis dejar todo lo que no sea importante a un lado cuando estéis en mitad del combate ¿Alguna pregunta?
-Si, solo una -Exclamó Luke desde el final de la sala- sé que los informáticos debemos hacer también el entrenamiento básico por lo que pueda ocurrir. Pero ya que no es del todo necesario, ¿nos podría dar la alegría de echarles barro la próxima vez que se peleen?
-Aprecio su sentido del humor señor Harris, pero creo que no se reiría tanto si les diese la oportunidad de contestarle a cualquiera de ellas dos.
-Umm, no creas Hank seguro que podría sacar algo por lo que estar contento.
-Jejeje, muy bien, creo que ya es suficiente por hoy. -Dijo Hank mientras le echaba un vistazo al reloj- Id a vuestra habitación, daros una buena ducha y descansad porque mañana será...
-Esperad un segundo -La voz de Iker se elevó por encima de las demás. Él y Shane se encontraban en la puerta de entrada del dojo- tenemos que hablar un par de cosas con Hank y luego con vosotros.
Un ligero barullo se formó mientras Shane e Iker atravesaron la sala hasta reunirse con Hank.
-¿Qué ocurre chico? -Preguntó el veterano.
-Cooper nos ha metido un poco de prisa, tenemos que empezar a definir las secciones y como la mía es la que requiere la formación más específica, me ha sugerido que complete mi grupo ya -Respondió Shane algo tenso.
-¿Tienes ya decididos tus aspirantes? ¿Corresponden con lo que teníamos pensado?
-Si casi todos, como siempre no te equivocas, pero antes quería preguntarte algo.
-Lo que sea cachorro.
-Hemos observado a Sam, y en como se ha dejado llevar en la pelea con Hannah ¿Estás seguro que es la persona adecuada? No quiero que cuando llegue el momento alguien pierda el control.
-Shane, la hemos raptado, la hemos acogotado. Ella y Luke son seguramente los que más descolocados se encuentran, con la diferencia de que el americano lo soluciona todo con bromas. Es sin duda la persona que más tensión ha soportado aquí. Es lógico que algún día de estos estallara por todo lo que ha pasado. Lo que me sorprende es que haya tardado tanto. -Comentó Hank con los brazos en jarras- Tiene temple, mucho además, y sabes mejor que yo que es una cualidad que se necesita. Es aún un diamante sin pulir, pero puedes sacar un verdadero valor en alza de ella ¿Y tú Iker, también empezáis la formación?
-No, aún no. Posiblemente la semana que viene. Solo necesito a uno de ellos y todavía puedo observarlos un tiempo más.
-Ok. Bueno, ¿quién de los dos se lo dice?- Les preguntó Hank a los dos jóvenes.
-Yo mismo -Exclamó Iker que con paso constante se dirigió a los reclutas- Buenos tardes a todos. Ya hace casi dos meses desde que empezamos a convivir todos juntos en estas instalaciones y fuisteis puestos al corriente de lo que aquí hacíamos. Hoy os voy a dar algo más de información y a explicaros porque os queremos a algunos de vosotros. El nombre extraoficial de este complejo es "Bastión VII" y así es como se nos conoce a los que estamos aquí. No os voy a explicar porque se nos llama así, tampoco tiene mucho sentido, pero si os voy a decir que en los sucesivos días se os va a ir seleccionando y situando en la jerarquía de las distintas secciones de Bastión VII. Por eso estamos hoy aquí Shane y yo. Supongo que algunos ya os habréis dado cuenta de que Shane no pertenece al grupo normal de infantería.
-Si, no es muy normal ver a un tío con un arco paseando -Exclamó Karen entre las risas de los demás.
-Jejeje, no desde luego, aunque tú si sabes a que me refiero Karen. Shane dirige a los tiradores tácticos.
-¿Tiradores... qué? -Preguntó Sam.
-Francotiradores Sam -Contestó Terry a su lado.
-Exacto señor Milton -anotó Hank- y es tremendamente bueno, pero tiene dos vacantes en su grupo y dos de vosotros vais a cubrirlas.
El murmullo se hizo generalizado.
-Bueno, si hay que disparar desde lejos y no hay peligro de tener las balas pegadas al culo, cuenta conmigo -Exclamó Anthony riéndose.
-Puestos a estar a distancia os ganamos los informáticos -declaró Luke.
-Un momento por favor -Pidió Iker haciendo gestos de que se calmaran- Vamos a hacerles las pruebas a tres de vosotros que son Terry, Sam y Viktor.
Sam miró a Terry que perplejo le devolvía la mirada. La joven no podía decir que le sorprendiese, al fin y al cabo en su interior se lo había estado imaginando desde el principio. Fue entonces Viktor el primero en preguntar con su marcado acento ruso.
-¿Y cuando serán las pruebas?
-Ahora mismo -Contestó Shane desde el final- Demostradme de que estáis hechos.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

ey litos soy er tator,no lo e podio leer x q no dispongo de muxo tiempo y me gustaria leerlo desde el primero,con decire ke te escribo esto mientras juega el barsa con er chelsy pero voy a sacarlo de ond aga farta pa desirte ok?weno tio ke ya van dos uuuyy!!! de mi padre y es irresistible asinke aver como sale yy ke ya me pondre en conacto cn tigo wiki?ns bms y kuidat a y bss y abrazos mios y de la yeray (ke si no me mata)dw

litospk dijo...

Gracias Tator tio, se te echa un monton de menos el no verte ^^
Cuidate campeon y enhorabuena de nuevo

Unknown dijo...

Coming soon, mi comentario. Por aquí por méxico tengo gente aficionada a la lectura y también a escribir, asi que no soy la única que está leyendo tu historia. En breves oirás de mi^^

besitos!!

litospk dijo...

Gracias Irenita sabes que siempre agradezco las criticas (constructivas sobretodo. constructivas son amor eterno, destructivas hacen llorar al niño Jezú)