viernes, 3 de octubre de 2008

Un poquito de Historia en Braunschweig

Hola amiguitos!
Debido a recientes acontecimientos, que se resumen en que me han engañado, y al final, este fin de semana, voy a ir al Oktoberfest, a München (Munich), a pesar de los trillones de horas de tren, y muchas más sin dormir. Pues he decidido, que aunque tenía preparado un aporte especial, por falta de tiempo, os voy a hablar de la ciudad vecina a la mía ( porque si, Wolfenbuettel es una ciudad, aunque parezca un pueblo). Os hablo de Braunschweig (Brunswick), la cual es una bonita ciudad, que se encuentra a 15 min. en bus de Wolfenbuettel.
Está de aquí es una calle de Braunschweig, por la noche (en realidad, eran las 7 y media, y como veis no había ni Cristo).
Braunschweig no es una ciudad excesivamente grande, se podría comparar a Granada, pero al igual que Granada, ser pequeña no quiere decir que no tenga su encanto. Empezando por el parque que hay en Konrad-Adenauer Strasse, el cual es grande a la par que impresionante. Además es recorrido por uno de los múltiples ríos de esta ciudad, y el viaje en barca es precioso, para quien quiera (se pueden alquilar canoas para recorrerlo).
Después de salir del parque, una buena opción es dirigirse a Kohlmarkt, que es una bonita plaza peatonal, situada en el centro de la ciudad, donde hay una gran actividad comercial. Pero lo verdaderamente interesante vendrá si continuamos un poquito más adelante, porque iremos a dar con el Palacio de Heinrich der Löwe (Enrique el León), que se observa a continuación, y la estatua de Braunschweiger Löwe (El león de Braunschweig, que podemos ver aquí a la izquierda también). Enrique el León es toda una leyenda en Alemania. Vivió en el siglo 12, y hasta que su primo Barbarroja (no, no es un pirata, era un emperador romano) lo derroco, fue uno de los nobles más importantes de Europa. Fundó ciudaades como Braunschweig, Munich, Lübeck y Luneburgo. En el apogeo de su reinado sus territorios ocupaban toda Alemania, parte de Polonia, parte de Austria y Suiza. Su mujer, Matilde, era hermana de Ricardo Corazón de León, lo cual le proporcionaba un gran poder a nivel europeo. Se distinguía por ser un gran estratega, una persona muy inteligente, muy codiciosa, y sobretodo, muy ambiciosa.
Cuando Barbarroja lo desposeyo de sus tierras, Enrique pasó 3 años en Normandía con su suegro el rey de Inglaterra (Enrique II). Tras otro breve exilio murió en Braunschweig y fue enterrado en la Catedral de la ciudad. La parte macabra la pusieron los nazis, que en 1935 exhumaron la tumba con "fines arqueológicos". Incluso Hitler acudió, pero lo que encontraron no agradó excesivamente a los nazis, puesto que el cabello de Enrique era curiosamente negro como el carbón. Este descubrimiento fue silenciado por la maquinaria propagandística naza, puesto que Enrique simbolizaba esa conexión cuasi divina de la raza Aria, ya que había sido un hombre tremendamente poderoso, y claro reconocer que no era rubio, podía dar lugar a las dudas en la raza superior. En la parte norte de la catedral, se encuentra una puerta que, según los habitantes de la ciudad, tiene marcas de garras del león de Braunschweig, que lloraba a su dueño muerto. La realidad es que son marcas de las armas de los soldados, los cuales afilaban sus enseres contra la puerta.
Espero que os haya gustado la crónica de Braunschweig, cuando vuelva de Munich, prometo escribir la 4º parte de la historia interactiva y una crónica sobre mi experiencia en el Oktoberfest
Besos y Bis Bald

1 comentario:

Lugilde dijo...

Es curioso nunca esta de menos saber algo mas de historia